Al igual que con muchas especies, la expansión hacia el oeste, la transformación humana del paisaje y el miedo condujeron a la casi erradicación de los osos pardos en el territorio continental de Estados Unidos. Cuando el oso pardo fue incluido en la lista de la Ley de Especies en Peligro (ESA) en 1975, la población de osos pardos en los 48 estados bajos se reducía a menos de 1000 osos. Reconociendo que los conflictos entre humanos y osos, eran una de las principales causas de las muertes de osos pardos relacionadas con el hombre, Defensores inició un programa de mitigación de conflictos con osos pardos, o de coexistencia, a finales de la década de 1990.
Vida Silvestre y Lugares Salvajes
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